Los tratamientos estéticos son cada vez más comunes entre las personas de todas las edades, siendo cada vez más común que chicos y chicas jóvenes se pasen por nuestra clínica de medicina estética en busca de tratamientos preventivos.
Uno de los tratamientos que más nos solicitan es el de baby botox, por ello, en el artículo de hoy daremos paso a este tratamiento para conocer en qué consiste.
¿Qué es el baby botox?
El baby botox no es más que la aplicación de pequeñas dosis de toxina botulínica tipo A, lo cual se lleva haciendo desde hace muchos años, pero últimamente está cobrando mucha fuerza debido a que nuestros pacientes se cuidan cada vez a edades más tempranas de manera preventiva, siempre conservando una expresión natural, y retrasando la aparición de las arrugas del tercio superior del rostro.
Se puede considerar como un efecto rápido donde a los pocos días ya se empieza a notar como las pequeñas arrugas de expresión comienzan a difuminarse.
¿En qué consiste el tratamiento de baby botox?
Este tratamiento se aplica en el tercio superior del rostro para tratar las arrugas del entrecejo, frontal, y las conocidas “patas de gallo”. Es un tratamiento rápido, sencillo y prácticamente indoloro que no deja marcas y no necesita anestesia.
Es importante que el médico que vaya a hacer el tratamiento de baby botox tenga conocimientos sobre la anatomía facial y sepa aplicar correctamente el producto, de manera que se eviten resultados indeseados. Siempre hacemos hincapié en la importancia de acudir a un profesional con experiencia.
Con este tratamiento logramos educar a los músculos a que no se esfuercen demasiado en realizar determinados movimientos. Y, no temáis, ¡¡que un botox bien aplicado NO deja la cara planchada!!
La duración del tratamiento de baby botox depende de cada paciente, pero lo habitual es que dure entre cuatro y seis meses.
¿Cuales son las indicaciones y que vamos a conseguir con baby botox?
Es un tratamiento ideal para pacientes que quieren empezar a cuidar su piel. La edad para empezar suele estar entre los 28-30 años, pero también es cierto que muchas veces el rostro no refleja nuestra edad, con lo cual lo más adecuado es realizar un diagnóstico personalizado multidimensional para determinar exactamente cuáles son las dosis más apropiadas.
Como hemos mencionado anteriormente, se trata de un tratamiento que ayuda a lucir una piel más joven, pero cuenta con más beneficios como:
- Atenuación de arrugas
- Quitar cara de enfado
- Mantiene el movimiento natural de la cara
- Piel suave y tersa.
Si necesitas más información no dudes en ponerte en contacto con nosotros.